El día 18 de junio se llevó a cabo en CAIXAFORUM la conferencia sobre “Las secuelas de las carencias y duelos en los niños adoptados. Consecuencias en su psiquismo y en la relación con sus padres” con una gran afluencia de padres (120 personas).
Los asistentes disfrutaron con la seriedad de los temas tratados por la Dra. Vinyet Mirabent y su dulzura para expresar a los padres con realismo y rigor científico los desafíos y apuestas que representa una adopción.
Puso especial énfasis en el papel de los padres como el apoyo adulto “suficientemente bueno”, parafraseando a Winnicott (célebre pediatra y psicoanalista inglés) para producir y sostener la matriz de intercambio que propenda al desarrollo físico, neural y psíquico del hijo. Este apoyo se constituye en el organizador psíquico necesario para ajustarse a las necesidades de los hijos.
Los padres deben realizar distintas funciones:
1- Captar que tiene el pequeño en su mente
2- Interpretar los mensajes que emite
3- Verbalizar sus emociones y ayudarlo en su crecimiento emocional
4- Propender a una crianza que favorezca en los hijos una dependencia sana, no una dependencia adictiva y sobreprotectora
5- Favorecer su autoestima y valoración personal, tan necesaria para confiar en uno mismo.
6- Propender a la creación de vínculos estables que faciliten un apego seguro
7- Capacidad parental para anticipar los temores y ansiedades de los hijos
8- Haber elaborado ellos mismos sus propios duelos, frustraciones, decepciones y traumas encontrados en el camino hasta la búsqueda de una parentalidad
Una parte de su conferencia se centró en la explicitación del camino llevado por los niños antes de la adopción y las secuelas que marcaron sus vidas:
1- Experiencias de pérdida y privación física y afectiva con el aumento de la incertidumbre y ansiedad que ello genera.
2- Relaciones parciales y fragmentadas con la familia en primer término y luego con las cuidadoras. Falta de estabilidad
3- Insuficiente contención emocional para favorecer su crecimiento e integración psíquica
Estas cuestiones señaladas hacen que estos niños al llegar puedan presentar:
1. Modelos de apego inseguros
2. Baja tolerancia a la frustración
3. Falta de regulación emocional
Los impactos de las carencias marcan su impronta en la estructuración mental, en la salud física y en el psíquismo.
En el período de adaptación se requiere de los padres: tiempo, capacidad de conexión emocional, tolerancia a las frustraciones y en especial mucha dedicación, disponibilidad y presencia activa y lúdica. Tienen todos que aprender a quererse, a conocerse y a su vez a darse tiempo para que todos entiendan y asimilen tantos cambios operados en sus vidas.
No saltar etapas, no olvidar la historia de los hijos en el largo camino de llegada a casa, no compararlos con los niños del país, entender su ansiedad y sus dificultades. No ingresarlos precozmente en la escuela.
Como en el proceso de adaptación los hijos presentan algunas conductas especiales: Rocking (técnicas de autoconsuelo), inquietud y ansiedad, temores a la hora de dormir, dificultades con la alimentación, cuando no técnicas de evitación, pocas demostraciones de afecto, o por el contrario una pseudomadurez y aparente sociabilidad, no confundir este tipo de reacciones con falsos diagnósticos etiquetas, muy al uso hoy día:
Autismo, Hiperactividad con o sin Déficit de Atención, Trastorno Oposicionista Desafiante.
En resumen, es función de la ECAI “CREIXER JUNTS” promover en los padres sus recursos psicológicos para afrontar con mejores herramientas y conocimientos el trabajo de reparación de los hijos y el aprendizaje del oficio de padres.
Lda.Beatriz Salzberg
Psicóloga especialista en clínica/ Psicoanalista
Directora del Área Psicosocial de Créixer Junts