martes, 29 de junio de 2010

FILIPINAS, LA GRAN DESCONOCIDA EN ADOPCION INTERNACIONAL

Las Islas Filipinas se encuentran en la zona oriental, justo debajo de la isla de Taiwán. Se trata de un archipiélago formado por más de 7.000 islas donde encontramos una antigua colonia española, dominada por EEUU después de la segunda guerra mundial, siendo actualmente una república gobernada por su nuevo presidente Benigno Aquino.

Filipinas es un auténtico paraíso para los amantes de la naturaleza, el submarinismo, etc.,… Aunque podría extenderme mucho hablando de la belleza y candidez de las Islas, el objetivo de estas líneas es el de dar a conocer a los futuros padres adoptivos este pequeño paraíso para la adopción internacional.

Filipinas es un país en el que las adopciones se encuentran centralizadas en un organismo llamado Inter Country Adoption Board (ICAB). Este organismo se encarga de dirigir, controlar y ejecutar todo lo referente a protección de menores. De esta forma, los expedientes de adopción internacional deben ser aprobados por este organismo para que los padres adoptantes puedan ser incluidos en la lista de futuros padres adoptivos de Filipinas.

Desde el mes de junio del 2009, Filipinas cambió sus leyes referentes a la declaración de adoptabilidad de los menores. Desde esa fecha, conseguir el estatus legal de adoptabilidad de un menor se realiza de forma administrativa, en lugar de hacerlo judicialmente. Hacía mucho tiempo que los filipinos luchaban por este cambio legal, que mejora la calidad de vida de los menores y facilita e impulsa las adopciones internacionales. Gracias a ello y a la buena gestión del ICAB, actualmente los tiempos de espera se encuentran entre los 17 y 24 meses aproximadamente, desde el momento en el que es aceptado el expediente.

También es cierto, que por el momento, existe una moratoria por la que queda prohibido aceptar expedientes de adopción de niños de 0-24 meses. Sin embargo, sí se aceptan expedientes de familias que deseen adoptar a un menor a partir de los 25 meses de edad (Idoneidades de 0-3, de 0-4, son el rango de idoneidad más pequeño que aceptarían).

La adopción en Filipinas es una adopción dulce y familiar. Percibimos estos matices en cualquier momento del proceso de la adopción. Las asignaciones se hacen de una forma minuciosa, teniendo en cuenta toda la información de la que disponen, para poder encontrar los mejores padres a cada menor. En este sentido, también son especiales los informes médicos y psico-sociales del menor. Los informes que recibimos de Filipinas son sin lugar a dudas excepcionales, en ellos observamos generalmente una información médica detallada, incluso realizan pruebas específicas si consideran que son necesarias, suelen incluir una redacción espectacular de la historia clínica del menor y también informes de trabajadores sociales muy competentes y profesionales.

También observamos esos matices de cuidado y protección de los menores en el viaje a Filipinas. Se trata de un viaje que normalmente tiene una duración de una semana, en el que se exigen unos días de convivencia con el menor, a ser posible en el mismo orfanato. La idea es que los padres entren en el mundo del menor y se empiecen a crear lazos afectivos en el lugar donde el menor se encuentra más cómodo; su hogar y su país. Esta es una oportunidad, que considero de oro para los padres. Ese es el momento de aprovechar al máximo esos días y conocer el mundo que, hasta ahora, ha rodeado a vuestros futuros hijos, conocer sus costumbres, la comida que más le gusta y la que menos, si le gusta más jugar a coches o hacer puzzles, conocer a sus compañeros, a las cuidadoras, preguntar todo lo que os pueda ser útil para conocerle mejor, para que la adaptación posterior sea mucho más fácil.

Los orfanatos suelen estar fundados por religiosos implicados con el pueblo filipino. Cada uno tiene diferentes medios materiales, pero en lo que coinciden todos, es en el trato a los niños. El pueblo filipino conserva el sabor latino en el trato personal, el contacto físico se encuentra totalmente integrado en su cultura y tradición. Las cuidadoras tratan con cuidado y mimo a los niños, son frecuentes los besos, abrazos y tenemos que tener en cuenta que eso nutre a los niños prácticamente en la misma medida que la leche o el pan.

Hasta aquí mi pequeña introducción en este mágico mundo de la adopción internacional en la República de Filipinas. A principios de julio viajo a Filipinas para realizar algunas gestiones y acompañar a una pareja que adopta con Créixer Junts y que por fin les toca realizar el tan ansiado viaje para conocer e ir a buscar a su hija. Espero poder contaros muchas más cosas a la vuelta de mi visita.

Un abrazo a todos

Nuria Miranda
Delegada Créixer Junts Baleares